Cuando uno menciona la palabra Cusco en cualquier parte del planeta, automáticamente la relacionan con el Santuario Histórico de Machupicchu. Es innegable, casi imposible, mencionar a la región cusqueña y no referirse a la imponente ciudadela inca. Sí, la maravilla del mundo moderno tiene un sitio especial en Cusco. Sin embargo, no es el único atractivo por conocer en estas tierras.
Uno de los lugares más visitados en Cusco, es el Valle Sagrado, por sus imponentes escenarios naturales, rodeados de tanta historia y cultura milenaria, como en cada paso que das en esta región del sur peruano. Muchos de los amantes del trekking tienen como ubicación predilecta al Valle Sagrado, pero ese gusto va más allá por practicar su actividad física favorita: la cantidad de legado histórico que se encuentran en los vestigios de las zonas arqueológicas es tan impresionante como atrayente para los turistas.
Aquí, conocerás 4 sitios arqueológicos que no puedes dejar de visitar una vez que hagas el recorrido por el Valle Sagrado del Cusco.
Ollantaytambo
Esta fortaleza inca impresiona a todos sus visitantes debido a su perfección arquitectónica. En el pasado, Ollantaytambo fungió como un centro militar estratégico, además de utilizarse para actividades religiosas y agrícolas. Está ubicado en la provincia de Urubamba y entre sus vestigios arqueológicos aún puedes encontrar casas, calles y canales de la época incaica.
Según algunos investigadores, esta zona tiene más de 3500 años de haber sido creada, y para su construcción los antiguos incas utilizaron técnicas avanzadas de ingeniería, ya que la materia prima utilizada (rocas) fueron extraídas del río Urubamba, ubicado a 6 kilómetros de Ollantaytambo.
Pisac
A diferencia de Ollantaytambo, las ruinas arqueológicas de Pisac no están concentradas en un solo lugar. Están repartidas por toda la zona montañosa que está por sobre el pueblo de Pisac, creando la especie de un parque arqueológico didáctico donde siempre hay algo qué descubrir.
Plazas, andenes, torres, habitaciones y depósitos de le época inca aún se pueden apreciar en un estado de conservación envidiable, además de los vestigios de antiguos puentes colgantes del que solo quedan las bases.
Moray
Los vestigios que aún se encuentran en Moray, son de los más impactantes a la vista. Este complejo de andenes es una gran muestra para comprobar qué tan adelantado estaba el Imperio Inca para su época.
La agricultura era una actividad importantísima en el Tahuantinsuyo, por lo que trabajar con este sistema de riego futurista –y que se utiliza hasta esta época- era considerado toda una hazaña.
Sacsayhuamán
Este centro arqueológico también es considerado como una joya de la ingeniería prehispánica, ya que en sus más de 3 mil hectáreas se puede ver el enorme trabajo realizado. Algunos investigadores, calculan que para la mano de obra utilizaron a más de 25 mil hombres, entre los cuales había transportadores de piedras, talladores, ingenieros, astrónomos y arquitectos, los cuales se tardaron 90 años en concluir esta obra.
Lo más asombroso de estas estructuras, son los finos acabados en piedra, algunas de más de nueve metros de altura. También se estima que fue utilizado como centro ceremonial, por lo que Sacsayhuamán es regularmente utilizado como escenario del Inti Raymi, la representación de la fiesta del Sol.