Uno de los más reconocidos campeones del mundo del ciclismo, es el italiano Gino Bartali. Nació en Italia el 18 de julio de 1914, en Ponte a Ema, una localidad campesina de la Toscana. No solo es reconocido por su estupendo desempeño deportivo, sino por su maravilloso comportamiento humano. Fueron muchas las victorias que obtuvo en el ciclismo, pero su mayor logro fue el de poder salvar muchas vidas en la época de la Segunda guerra mundial, se dice que unos 800 judíos sobrevivieron gracias al heroísmo de Gino Bartali.
Sus triunfos deportivos
Debido a la humilde condición social a la que pertenecía su familia, para Bartali no fue nada fácil su desarrollo en el ciclismo. Tuvo que superar muchos obstáculos, pero pese a las adversidades, logró destacarse y coronar muchas victorias, convirtiéndose en uno de los 5 mejores de todos los tiempos. En su período profesional, desde 1935 hasta 1954, obtuvo 91 sus victorias. Ganó en tres oportunidades el Giro de Italia en los años 1936, 1937 y 1946; logró alzarse con dos victorias en el reconocido Tour de Francia en 1938 y 1948 y, también se hizo acreedor de dos trofeos consecutivos en el Tour de Suisse, en los torneos de 1946 y 1947.
La faceta humana de “il Ginettaccio”
Una vez que logró su popularidad como ciclista, decidió aprovechar su condición para brindar una importante ayuda humanitaria durante la Segunda guerra mundial. En unión a algunos miembros de la iglesia, transportaba documentación falsa para evitar que los judíos, en su mayoría niños, fueran trasladados a los campos de concentración de los nazis. Para ello, utilizaba el tubo de su bicicleta, y, obviamente no despertaba ninguna sospecha, pues era un campeón que entrenaba para sus competiciones mundiales.
¡Este innegable gesto de bondad, lo convirtió en nuestro más grande héroe ciclista! Y, así pasó a la historia. Aunque fue solo después de su desaparición que se supo de su hazaña, pues nunca comentó con nadie lo que hacía. Para él, lo único importante era hacer el bien y no sentía la necesidad de decirlo.
El duelo de siempre…
Cuando hablamos de ciclismo italiano, es inevitable pensar en los dos eternos campeones italianos, el legendario Gino Bartali y Fausto Coppi, quienes nos cautivaron con sus duelos, que más allá de ser una competencia entre deportistas, fue la representación de un duelo entre dos clases sociales muy diferentes de Italia: la clase alta y económicamente fuerte a la que pertenecía Coppi y la clase campesina y humilde de Bartali. Sin embargo, su relación fue siempre respetuosa y cordial, donde Gino fue compañero y guía del mucho más joven Fausto.
Reconocimiento póstumo
Bartali falleció el 5 de mayo del 2000. Seis años después de su muerte, su esposa Adriana Bartali, recibió del Presidente de la República Carlo Azeglio Ciampi la “Medalla de oro al valor civil” y en el año 2013, fue declarado “Justo entre las Naciones”, honor que confiere Israel a través de la institución Yad Vashem a los no hebreos, por haber salvado al menos un judío durante la Segunda guerra mundial. Luego, en el 2018, fue nombrado “Ciudadano Honorífico” de Israel, durante el inicio de la edición 101 del Giro de Italia, que arrancó en Jerusalén en honor al “Ciclista que engañó a los nazis”.