El divorcio es un mal necesario, ya que aunque es un trámite que tiene muchas implicaciones para la familia, es mejor que mantenerse casados cuando la relación ya no funciona.
Cada caso de divorcio es diferente. En algunos, la pareja es consciente de las consecuencias de un conflicto en el seno familiar, y otros, se enfrascan en peleas sin sentido. En el medio hay toda clase de situaciones, que pueden ser positivas o negativas.
Lo importante es que, si hay hijos pequeños, se garantice su seguridad, bienestar y no se vulneren sus derechos, como consecuencia del divorcio de sus padres.
Tipos de divorcios
Básicamente, hay 2 tipos de divorcio, el de común acuerdo y el contencioso. Cada uno de ellos tiene diferencias, porque puede ser un divorcio con hijos, sin hijos, con bienes en común o sin ellos.
Lo mejor es tratar de llegar a un acuerdo entre los cónyuges, como manera de facilitar los trámites y que todo transcurra lo más rápido posible. Sin embargo, eso a veces no es posible, entonces hay que llegar a los tribunales para tomar una decisión.
Recomendaciones para padres que se divorcian
Lo primero que deben tener claro ambos cónyuges, es que se están divorciando ellos, no los hijos. Uno de los principales deberes de los padres es proteger a sus hijos, y en un trance como este, más todavía.
Las siguientes son las recomendaciones para ellos:
- Los chicos deben estar informados, según su edad, de lo que está sucediendo, pero eso se debe hacer sin hablarles mal de ninguno de sus padres. Hay que ser objetivo en señalar los hechos, sin mentirles.
- En Divorcionetas tienen abogados de divorcios con habilidades en negociación, quienes pueden tratar esos asuntos profesionalmente. Por eso, siempre que sea posible, es mejor que se llegue a la custodia compartida. Los hijos necesitan de su padre y su madre por igual, así que esta es la mejor opción, a menos que exista alguna situación que lo impida.
- Hay que evitar discutir acaloradamente en presencia de los hijos. Si la pareja tiene problemas para manejar la ira, puede ser conveniente asistir a terapia psicológica. Un psicólogo es el profesional indicado para brindar herramientas con el fin de comunicarse asertivamente.
- Ninguno de los 2 padres debe usar a los hijos para vengarse. Separar a los hijos de su padre o de la madre puede afectar más al pequeño que al adulto. No se le está haciendo daño al cónyuge, sino al propio hijo.
- Si la custodia compartida no se establece, hay que llegar a un acuerdo común con el régimen de visitas, de manera que los niños continúen viendo a su padre o madre con regularidad.
- Cuando se esté negociando la pensión alimenticia, hay que ceñirse a la ley y a las condiciones económicas de los padres. La pensión alimenticia no debe usarse para venganzas, ni para buscar recompensas, el objetivo es cubrir los gastos de los niños.
- Si alguno de los 2 cónyuges tiene una nueva pareja, es mejor que la mantenga al margen de todo el proceso. No debe acudir al tribunal, ni al despacho del abogado con esta persona, y mucho menos darle la palabra.
- Los niños no deben acudir con los padres a los trámites de divorcio, ni siquiera al despacho del abogado. Todas estas conversaciones, negociaciones y firmas, deben ocurrir sin la presencia de ellos, ya que esto puede dar pie a chantajes, situaciones emocionales y escenas desagradables para todos.
- Lo más común es que el progenitor que se quede con la custodia de los hijos, sea quien conserve el uso de la vivienda familiar. Es importante que cada uno de los padres ofrezca máxima prioridad al bienestar de los niños en sus demandas a este respecto.
El abogado de divorcios tiene entre sus objetivos acordar el máximo bienestar de todos los miembros de la familia, por lo que su consejo será muy valioso en estos casos.