Con o sin visera, con mesita auxiliar incorporada, reclinable, con sombrilla… Lo cierto es que, cuando nos ponemos a ojear catálogos de tumbonas para el jardín o la piscina, el abanico es tan amplio que puede llegar a abrumar. Por eso, te invitamos a seguir leyendo para resolver dudas y hacer la elección acertada.
Cuando hablamos de tumbonas, lo hacemos de distintos materiales, funcionalidades o precios. Son elementos que, según el clima, se usan más allá del verano. Por eso, lo ideal es apostar por materiales resistentes y de alta durabilidad. Tenemos además que pensar si la queremos o no acolchada, con fibra sintética, con reposacabezas o cojín, etc.
La mayoría son reclinables, pero no todas son plegables. Si vas a dejarlas fijas en el jardín o la piscina no hay problema. Pero si las tienes que quitar y almacenar, que se puedan plegar es condición sine qua non. Tenemos que pensar además si queremos que lleven ruedas para poder moverlas más fácilmente.
Entre las más populares, destacan las tumbonas de resina. Son muy resistentes y ligeras y aguantan perfectamente la lluvia y el sol. Destacan por su elegancia y son muy ligeras y, por lo tanto, fáciles de mover y almacenar. Se fabrican con aluminio (para la estructura) y rattán sintético. En realidad, es polietileno de alta densidad que imita al rattán natural. Por eso, pueden estar en contacto con el agua y las podemos colocar sin problema en la zona de la piscina.
Elegir la tumbona según el espacio
Tumbonas para la piscina
En este caso necesitamos modelos resistentes al agua, a los rayos UV y a los cambios de temperatura. Destaca en este sentido el Textilene ®, un material muy resistente. Se trata de una malla de vinilo en hilo muy resistente que va recubierta con PVC. Está disponible en varios colores y se usa sobre todo en mobiliario para exteriores. En definitiva, una alternativa ideal para tumbonas ya que es elegante y muy resistente a la exposición del sol, a la humedad y al agua.
Tumbonas para el jardín
Tenemos que prestar atención al diseño para dar forma a un espacio elegante, confortable y funcional. Las tumbonas nos serán de utilidad en multitud de escenarios: para leer en soledad, para tomar el sol o para disfrutar de un día con amigos. Las tumbonas de ratán serán siempre una de las mejores alternativas. Las podemos acompañar del acolchado o tapicería que más nos guste.
Tumbonas para la terraza
Aunque no tengas piscina ni jardín pero sí terraza, las tumbonas también tendrán cabida en tu mobiliario de exterior. Normalmente la superficie será más limitada y por eso será mejor decantarse por modelos fáciles de guardar y almacenar. Para poder retirar las tumbonas cuando tengamos que liberar el espacio.
Tumbonas para playa
Uno de los espacios donde no puede faltar una tumbona. Aquí tendremos que elegir una plegable y, al ser posible, con parasol o sombrilla. Hemos de elegir modelos ligeros y fáciles de transportar. Recuerda que el hecho de que sea ligera no tiene que significar que sea incómoda. De hecho, si eres de los que pasa más tiempo al sol que en el agua, tendrás que dar mucha más importancia a la comodidad.