Los chiles chipotles son un símbolo de la comida mexicana, caracterizados por su sabor súper picante. Con el paso de los años, estos han llegado a estar presentes en diferentes platos del mundo y cada vez son más conocidos. ¿Quieres integrar este ingrediente en tu cocina? Entonces conoce todo sobre él, desde su origen hasta otros aspectos importantes que rodean este condimento tan peculiar.
Origen y cultivo del chile chipotle
El origen de los chiles chipotles se remonta a la antigua Mesoamérica, hogar de los aztecas y otros pueblos indígenas que llegaron a cultivarlo. Era muy común que los Aztecas utilizaran distintos chiles para llevar a cabo sus preparaciones culinarias, entre los que estaban incluidos los chiles chipotles.
El nombre chipotle se desprende de la palabra náhuatl “chilpoctli”, que se traduce como “chile ahumado”, un proceso que permitía que pudieran conservarse por más tiempo. Por otro lado, debes saber que las vainas de los jalapeños se cosechan rojas, solo en la temporada de otoño, y se dejan en los arbustos hasta que ya han perdido gran parte de su humedad. Esto a su vez les permite tener un dulzor extra si los comparamos con los también famosos jalapeños verdes.
Una vez se termina la cosecha, los chiles que están maduros se ahúman de forma directa en el campo, usando sobre todo madera de pacana. Cuando los chiles se secan con el humo, a una temperatura de 165 o 75 grados Celsius, su peso disminuye considerablemente, de manera que 10 kilos de jalapeños pueden llegar a ser un kilo de chile chipotles.
Nivel de picor de los chiles chipotles
El picor de los jalapeños rojos puede oscilar entre 5.000 y 10.000 Scoville. Sin embargo, el ahumado y el calor hacen que los chipotles pierdan una parte de su picor, lo que hace que se vuelva más suave su sabor.
Tipos de chipotle
En México se cultivan mecos chipotle y morita. Morita quiere decir pequeña, en español, y es un tipo de chile que tiene un color rojo muy oscuro y brilloso. Por su parte, el meco es considerado la variedad de chipotle de más calidad, tiene un color marrón grisáceo y su piel es espolvoreada. El sabor del meco es más ahumado y es el que se usa frecuentemente en la gastronomía tradicional de México.
Por otro lado, siendo cuatro veces más costoso que un chipotle jalapeño, el Huachinango es otro tipo de chipotle. Este tiene un sabor bastante parecido al chipotle tradicional, pero es mucho más grande.
Usos culinarios del chile chipotle
Los chiles chipotles son un ingrediente bastante común en la cocina mexicana y puede usarse de distintas maneras:
- Salsas: los chiles se trituran y agregan a las salsas para acompañar carnes, aves y pescados. También se pueden usar en las salsas barbacoa o mayonesa para un sabor picante y graso.
- Guisados: se utilizan en guisos, como albóndigas o picadillo. Además, se puede encontrar chipotle en polvo con el objetivo de facilitar su adición a los guisos.
- Sopas, tacos y hamburguesas: los chiles chipotles adobados en salsa de especias y tomate, les dan un toque ahumado y picante a las sopas, tacos, hamburguesas y otros platos.
¿Cuáles son los beneficios nutricionales del chile chipotle?
Estos son los beneficios nutricionales más importantes del chile chipotle y una buena razón para incluirlos en tus recetas:
- Sistema inmunológico: el chipotle es rico en vitaminas A, B1, B2 y B3, y también posee propiedades antioxidantes.
- Colesterol: contribuye a reducir los niveles de colesterol en la sangre.
- Huesos: fortalece los huesos porque tiene un alto valor de calcio y magnesio.
- Estado de ánimo: ayuda a mejorar el estado de ánimo, puesto que libera endorfinas en el cerebro.
- Presión arterial: la capsaicina presente en los chipotles puede dilatar y relajar los vasos sanguíneos, lo que a su vez puede disminuir la presión arterial.